El Caldero

Como brujas que somos un día decidimos hacer un aquelarre para realizar nuestra máxima creación.

Mara llevó el Caldero hecho con arenas blancas de Cancún, al que Mariela le puso agua cristalina de las playas del mismo Cancún, Yusi le agregó reliquias olmecas de Veracruz hechas polvo, Dani redujo una cabeza de la isla de Pascua y echó la miniatura al caldero, Vale le puso el corazón de una rana coquí de Puelto Lico, Julia le puso los restos de un carro alegórico del carnaval de Río mientras Wanna le echaba una penca de maguey de Jalisco.

Después de que el caldero tenía algo de cada lugar de donde somos decidimos que lo mejor era hacerlo más nuestro al agregar diferentes cosas: los chones de todos los mijitos ricos que se nos aparecen, un frasco lleno de sarcasmo, la armónica de Terry, los lentes de Harry Potter, una quesadilla de don pelos, un afiche de Los Productores, los dibujos hechos en Brasil, el bastón de House, la gaita de Albert, un LP con lo mejor de los 80's, unos cigarros, las mil y un lágrimas de Candy, una foto de Will Kemp, el afiche de la película "Un lugar llamado Notting Hill", un cd de reggeatón puertorriqueño, un pelo grasiento de Snape, los documentos con las auditorías a Telmex, un poco de neuronas de todas y cada una de nosotras y, obviamente, una boina rosa.

Mientras todas decíamos nuestros conjuros propios: Yusi maldiciones al por mayor, Mariela recitaba los guiones de las obras y películas de Will Kemp, Dani decía el total de la N de pega que tenía que hacer, Mara repasaba de memoria la Constitución, Vale leía sus escritos, Wanna hablaba de las obras de Freud y Julia repasaba sus clases de español.

Finalmente y después de varios años de planear semejantes conjuros y 3 noches de insomnio mientras hacíamos todo, el resultado estuvo listo, y aquí lo tienen ustedes:

El Blog de las Boinas Rosas.