"En el fondo soy una buena chica. Pero también puedo ser una bruja. Soy una persona muy perfeccionista y tengo que soportar mucha presión. A veces, cuando quieres conseguir algo no tienes más remedio que ser una auténtica bruja". (Madonna)

ELLOS LAS PREFIEREN ELEGANTEMENTE GORDAS

Hoy fue uno de esos días en los que estaba harta de ver todos los días mujeres estupendas, delgadas y lívidas sobre la alfombra roja, la televisión, o incluso en la calle: de ésas que marcan clavícula, que tienen el vientre plano de tanto gimnasio o ésas que consideran al vómito el estribillo de la canción de su vida; si, ésas que ni siquiera se permiten un bocado de postre en el restaurante y viven condenadas para siempre a la ensalada y la Coca-Cola Light, y que generalmente provocan las más de las veces deprimirnos al mirar la imagen que nos devuelve el espejo todas las mañanas...

De pronto la imagen de un hombre guapísimo en una revista me demuestra y recuerda que que las mujeres somos guapas y atractivas, incluso si sólo podemos contar con un ula-ula como cinturón: ¡Brindo por Pierce Brosnan! mi eterno James Bond que sigue tan enamorado de su mujer, Keely Shaye Smith, como el primer día, aunque ésta considere más importante embutirse en una faja para enfundarse en un vestido de tirantes antes que ir al spa o a la estética de turno de las estrellas de cine en los momentos previos a un estreno .


Caramba, la realidad demuestra que aunque muchas tenemos senos generosos, pocas se atreven a utilizar un gran escote para lucirlo con elegancia, proeza que practica Keely, quien no duda en ponerse un hermoso collar cuajado de brillantes para ser la envidia de todas.


¡Digan que si! que con un escotón luciremos tremendas en el buen sentido de la palabra. Que no hay nada mejor que lucirnos sin complejos de ningún tipo y mucho menos por el sobrepeso igual que Keely. Así que, si admites consejos, toma nota: hay ropa de tallas grandes estupenda. Y, ahora bien, si puedes permitírtelo, ya sabes, la tarjeta de crédito puede ayudarte en esta misión.

¡Ah! Y tres cosas más: olvídate de las túnicas a lo Paquita la del Barrio, de desterrar el color negro al fondo de tu clóset y de pensar que el estilo sólo lo tienen las fashionistas esqueléticas.

La elegancia es una actitud: es el don de conseguir mucho con muy poco. Y que me parta un rayo, que eso no es sólo privilegio de delgadas.

¡Saludos desde el Caldero!

Atentamente,

Lady Mara Grandchester.

4 comentarios:

Unknown dijo...

La verdad es que hacen una pareja hermosa. Los dos son bellos. Ser lindo muchas veces es cuestion de actitud!

Saludos desde Cordoba!

Valerie Sensei dijo...

Maraaa, que bueno que hablas de esto. Tener unas libras demás no es impedimento para tener "sex appeal".

Por mi parte, mi escote es lo suficiente revelador. Lo muestro con orgullo!

Dylan dijo...

Levántome y quitóme el sombrero comayina del infierno.
Aunque prefiero la esbeltez... ahora que ya entre en tallas y no me las puedo quitar de encima, concuerdo contigo en que la actitud marca la diferencia
¡malhaya el dia en que salga de mi casa sin el corte adecuato, el maquillaje perfecto y sambutida en ropa que me favorezca... a mi y a mis ahora 60 kilos!

Besines!!!

Anna Ge dijo...

¿¿¿¿Yusi sufre por 60 kilos????

Sea la madre que nos parió a las dos...

Mara, me encantó eso que subiste, me encantó de verdad. Y es que, no hay nada como aceptarse una tal y como es, poder comer a guuuuuuuuuuuuuuuuuuusto y verse bonita, tal y como es...

Gracias Mara!